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Están muy en auge los masajes faciales y la gimnasia facial. Con tan sólo unos minutos al día podemos lograr grandes cambios en nuestra musculatura facial ya sea solo con manos o con algún elemento. Soy Belén Garrido, cosmetóloga y cosmiatra y hoy te voy a compartir un poco más sobre este tema tan interesante.

Cuando realizamos estas prácticas no solo ayuda a la parte estética de la piel sino también a lo emocional, a todas nos gusta darnos unos mimos y tener un momento para conectarnos con nosotras. Cuando realizamos este tipo de ejercicios no sólo vamos a ver cambios en los músculos de la cara sino también todos los productos de nuestra rutina van a funcionar mucho mejor.

Ahora bien, tenemos que diferenciar bien estos conceptos, que si bien son bastante similares tienen algunas diferencias.

¿Qué es la gimnasia facial?

En el gimnasio entrenamos todos los músculos corporales, haciendo ejercicios que requieran algún movimiento y esfuerzo con y sin elementos, la gimnasia facial es igual solo que en la zona del rostro. Cuando hablamos de gym, significa que vamos a tener que realizar algún movimiento o mueca para poder estimular los músculos faciales; que va a requerir algún tipo de esfuerzo que puede ser desde abrir los ojos hasta sacar la lengua, todo con el objetivo de fortalecer o generar un cambio en alguna característica que pongamos como objetivo.

¿Qué son los masajes faciales?

A diferencia de el gym facial, los masajes faciales son los que realizamos con nuestras manos o algún elemento como el gua-sha o rodillo que se desliza y masajea la piel del rostro generando un efecto similar al de la gimnasia facial, pero sin necesidad de realizar algún movimiento como los que mencionamos antes. Los masajes tienen como objetivo (además de realizar cambios en la musculatura facial), también de relajar y liberar tensiones acumuladas por el estrés o malas posturas. Recomiendo fuertemente realizar masajes en el cuello antes de comenzar cualquier rutina estimulación facial para poder liberar canales y que todo lo que hagamos luego fluya mejor.

Existen también combinaciones de ambas técnicas para llegar con las manos o elementos a más cantidad de zonas, esto nos va a permitir llegar a zonas más difíciles que quizá no llegaríamos sin algún movimiento extra.

Tanto el gym facial como los masajes faciales pueden realizarse antes de comenzar la rutina o al finalizarla, sellando con un aceite facial. Hay distintos tipos de aceites faciales para cada piel. Mi favorito es el aceite de jojoba que va con prácticamente todas las pieles. En el caso que lo utilicemos al finalizar la rutina, no es necesario enjuagarlo. Unas gotitas alcanzan para que nuestras manos corran bien y no generemos roces o fricciones.

Pueden realizarse tanto en la rutina de día como en la de noche, y con 5 o 10 minutos unas tres o cuatro veces por semana vamos a empezar a notar cambios. Como cualquier entrenamiento lo importante es la constancia, no existen los resultados mágicos pero sí son un hermoso complemento a nuestro día a día.

¿Qué necesitamos para realizar masajes faciales?

Existen distintos elementos para realizar masajes faciales, la mayoría son de algún tipo de piedra como el cuarzo, ónix o jade. Para reconocer que la piedra se autentica y no de vidrio, tiene que ser fría al tacto. Mi elemento favorito que es super fácil de incorporar es el rodillo facial. El rodillo puede utilizarse también al momento de aplicar un serum, por ejemplo, o cuando realizamos una mascarilla de tela para que impregne mejor. También nos servirá para masajes en el cuello y en el rostro en general.

Cuando estemos listas para pasar al siguiente nivel recomiendo el gua-sha, una piedra que se utilizaba en la medicina china para realizar masajes faciales “raspando” la piel hasta enrojecerla.

Todas estas piedras pueden meterse en la heladera para tener ese efecto frío y descongestivo pero ¡Ojo! No frío de freezer porque nos puede quemar, sí de heladera. Existen además masajeadores como crio sticks (¡también cucharas!) para ayudar por ejemplo a descongestionar bolsas debajo de los ojos. También muchos contornos de ojos están incorporando puntas metálicas para generar este efecto.

De todas formas, las manos son grandes aliadas y podemos lograr resultados increíbles con ellas. Empecemos a crear el hábito sin elementos y luego vayamos incorporándolos de a poco.

Espero que te animes a probar estos métodos alternativos de belleza facial y autocuidado. Y si te gustó la nota, puedes compartirla a esa amiga fanática del Skin Care.

Belén Garrido

Cosmetóloga & Cosmiatra

@belugarrido

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