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14 de Octubre
Nos alegra tenerlas de vuelta en este espacio que disfrutamos compartir con ustedes.¿Has escuchado o sabes qué son constelaciones familiares? ¿Repetir patrones o conductas de tus parientes? Hoy conocerás un poco acerca de este tema que es muy interesante, transformador, lleno de mucho amor y reflexión.
Les compartiremos información que puede ser útil para conocer y descubrir de dónde vienes, cómo es tu vida y los cambios que puedes llegar a tener. Esta vez, tomamos como fuente de inspiración la serie “Mi otra yo”, una serie original de Netflix. No te preocupes, no habrá ningún spoiler así que te animamos a que después de leer este artículo te motives a ver y disfrutar de esta súper serie.
El árbol genealógico es la manera de representar tu familia desde los antepasados y la descendencia de cada uno de ellos de forma cronológica y ordenada, así puedes conocer e identificar qué rasgos, parentescos o similitudes tienes con tu familia y qué patrones llevas repitiendo por muchos años que no conocías y que viven sumergidos en tus parientes. ¡Conocer, identificar, aprender y sanar para no repetir!
Conocer de dónde venimos, por qué nos comportamos de cierta manera y cómo nos relacionamos con los demás, viene de la raíz de nuestra familia. Si no conocemos la historia de nuestros abuelos y nuestros padres, por ejemplo, no sabremos a fondo por qué somos o actuamos de cierta manera en diferentes situaciones.
La relación con nuestros padres y abuelos influyen en nuestra vida, así no lo creas. Nuestros comportamientos, actitudes y manera de relacionarnos en el amor, con las amistades, en el trabajo y en el entorno social parten de esas experiencias y vivencias que tuvimos en el pasado, en sus diferentes escenarios. La manera como papá y mamá nos brindaron amor, atención y cuidado influye en nuestro desarrollo y crecimiento, en los patrones de conductas, pensamientos y manera de sentir las emociones.
Detenernos a mirar y analizar la historia de nuestro árbol genealógico nos ayuda a comprender un poco la razón de muchos sucesos, acontecimientos o comportamientos de nuestra vida. Es conocer lo que ha estado detrás de nosotros por mucho tiempo y no lo hemos mirado a los ojos.
Educar, criar y enseñar con y desde el amor, no será igual si se hace desde el resentimiento o el dolor, pues están criando sus heridas y su dolor, no un ser que ha sanado y está dispuesto a hacerlo desde el aprendizaje.
Nosotras nos relacionamos de la manera cómo nos enseñaron o lo aprendimos, y eso no está mal, pero debemos dar una mirada desde el corazón y la consciencia, para asi analizar qué es eso que consideras que repetimos de nuestros parientes, si te representa y muestra lo que en realidad eres o quieres llegar a ser . Analizarnos y escucharnos es una terapia propia que nos ayuda a mirar más allá de lo habitual o monótono para empezar a trabajar en esos patrones que repetimos, que no son sanos y así liberarnos de ataduras que hemos cargado por mucho tiempo. Este es un método liberador que puedes implementar como ejercicios para sanar el árbol genealógico.
La relación que tenemos con nuestros parientes es completamente estrecha, no es solo un tema genético sino que va más allá de la naturaleza humana. En la serie Mi otra yo,podemos verlo reflejado, la protagonista emprende un viaje con dos amigas, experiencia que les cambiará la vida al descubrir relaciones sobre miembros de sus familias y versiones de ellas mismas que no conocían.
No hay un manual o fórmula mágica que sane las heridas de nuestros padres. Sanar a padre y madre es entender que actuaron como lo hicieron con las herramientas y el conocimiento que tenían en su momento. Sanar es aceptar y reconocer que papá y mamá antes de ser padres, son seres humanos.
Los lazos generalmente más fuertes son los que tenemos con nuestros padres, si hay nudos que están tropezando nuestro andar en el camino de la vida, hay que hacer un alto y analizar qué no nos deja avanzar, buscar ayuda profesional para mirar más a fondo, y desde una perspectiva profesional, qué está pasando en cada uno de esos tropiezos.
Sanar es aceptar, reconocer, perdonar y soltar eso que no puedes controlar ni cambiar, pero que sí puedes darle un sentido de aprendizaje y transformación a tu vida. En la serie, Mi otra yo, nos muestra esa conexión invisible que hay con tu mamá, tu abuela y tú. Esa parte de tu vida que manifiesta tu manera de expresar y dar amor a los demás, tu lado compasivo contigo, cómo te hablas y te tratas, cómo te comportas y demuestras tus afectos a las personas de tu vida. Ignorar o dejar a un lado esto, es ignorar u olvidarte de tu lado femenino.
Es posible sanar si tomas la decisión de hacerlo por tu salud mental y emocional, por tu bienestar, por trascender, por crecer y amar de manera sana y desde el amor y la libertad, no desde el miedo y las heridas. Hacer conscientes esos patrones que se vuelven repetitivos y trabajar en ellos para ser un alma liberada del dolor y de traumas.
Las heridas no sanadas se vuelven repetitivas en tus relaciones de pareja, laborales, sentimentales, familiares, etc. El no hacerlas conscientes y no trabajarlas de manera adecuada nos traen consecuencias para nuestra salud mental y emocional, ¿por qué? Porque estás repitiendo conductas no sanas que aprendiste en la niñez, por ejemplo, creer que no eres suficiente, rogar amor, perder tu identidad, sentir miedo al estar sola o expresar tus sentimientos, apegarse afectivamente a tu pareja, etc. Reconocerlas y convertirlas en aprendizaje, es la puerta para crecer y avanzar desde la transformación y la liberación.
Sanar toma tiempo, es doloroso y quizá un poco complejo, pero todo radica en la actitud y las ganas que le pongas a vivir y disfrutar este proceso. Te aconsejamos consultar con una psicóloga, quien será un pilar importante para brindarte herramientas y el acompañamiento necesario para este camino que empezarás a descubrir y que estará lleno de lágrimas, caídas, preguntas, tristezas, llanto, etc.
La ayuda profesional te permite mirar el pasado con otros ojos, comprender sin juzgar y aceptar para vivir sin cargas, dolores o culpas que no te permiten tener una vida plena, equilibrada y llena de bienestar. Ir a terapia es uno de los tantos ejercicios para sanar el árbol genealógico.
Sanar hace parte de la manera como enfrentamos y vivimos nuestra vida, de ser conscientes que no tenemos la culpa de los errores que cometieron nuestros padres, pero sí es nuestro deber y responsabilidad trabajar en Nosotras para vivir sin heridas que nos persiguen hasta que no las miremos a los ojos y trabajemos en ellas para sanarlas y tomarlas como un aprendizaje para la vida y nuestras relaciones. ¡Sanar te libera!
Si quieres saber más puedes entrar a este artículo
A través de esta serie puedes comprender la manera cómo sanar el pasado con tu familia. Muestran los cambios, procesos y transformaciones que llevan a tres chicas a reconciliarse con su pasado y la importancia que tiene para la vida conocer, aceptar y perdonar nuestro pasado, un asunto que a la hora de la verdad es difícil para muchas personas.
Si te llama la atención o siempre has querido empezar a auto descubrirte o trabajar internamente en ti, en tu alma, tu mente y tu corazón, esta serie es ideal para tu vida en estos momentos, regálate la oportunidad de verla y disfrutarla abriendo tu mente y tu corazón, seguramente habrán cosas que te quedan en la cabeza y otras que te toquen el corazón.
Mi otra yo simboliza la aventura que todas deberíamos decidir vivir en algún momento de nuestra vida. Nos recuerda que debemos aterrizar nuestra existencia humana, la cual atraviesa por cambios y descubrimientos que aunque muchas veces nos asustan o no nos gusta lo que vemos y sentimos, hacen parte de la vida y nuestra evolución como seres humanos. Nos muestra las distintas versiones que hay de nosotras mismas a través de cada uno de nuestros ancestros. ¡La naturaleza humana de vernos a través de otros ojos que nos inspira a cambiar o a quedarnos estáticos!
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